La tarea de ser maestrx es una de las más esenciales para que la vida se conserve. Se transmite información, valores, cultura, estilo de vida a través del afecto y el cuidado.
La tradición del yoga se sostiene desde hace miles y miles de años a través de esta cadena ininterrumpida de maestrx a discípulx.
Escuchaba al gran yogui Mark Whitwell decir que «El maestro es la función nutridora de la madre tierra en cada comunidad. Si no hay maestros estamos acabados! Es indispensable que haya maestros.»
También mencionaba que la tarea de alumbrar al maestro es dificil hoy en día, por que todo se industrializa, se estandariza, y no se valora.
Y por que requiere de un constante trabajo de autoobservación de los propios condicionamientos, para no pasárselos a la próxima generación.
En yoga esta autoobservación se desarrolla alimentando la mente de principiante, manteniéndonos cerca de la enseñanza y de los compañeros de camino Satsangha.
Como profes de yoga y nutridores de nuestrxs alumnxs, necesitamos también alimentarnos al mismo ritmo: cuanto más clases damos, más necesitamos recibir.
Personalmente todos los años tomo cursos o formaciones, de prácticas y enseñanzas que quiero profundizar o recordar.
Si ya estás buscando como nutrirte este año, te invito a la Formación en Meditación y Mantras. Podés conocer más en el encuentro informativo en unas semanas. Consultame!
Que tu práctica sea una ofrenda de luz para todos. Ceci